CULPA: Responsabilidad o causa de un suceso o de una acción negativa o perjudicial, que se atribuye a una persona o a una cosa.
Imputación que se realiza a alguien por una conducta que generó una cierta reacción
Vivimos en una sociedad en la que tenemos la tendencia a culpar a las demás personas constantemente, nos parece algo muy natural señalar con el dedo a cualquier persona y culparla de miles de cosas y peor aún, nuestra cultura nos ha enseñado a culparnos a nosotros mismos de todo.
Caminamos por la vida con un enorme peso a cuestas, un costal lleno de sentimiento de culpa que generalmente se convierte en dolor físico, esa tensión en el cuello, ese dolor de cabeza, ese cansancio y apatía, esa tristeza, ansiedad y depresión es directamente proporcional al peso de las culpas que vamos acumulando al paso de los años y de las cuales, la mayor parte del tiempo no estamos consientes pero están allí, escondidas y causando estragos.
Nuestra sociedad nos educa así, desde niños nos hacen sentir culpas que no nos corresponden, nos dicen: mira, tu hermano se cayó por tu culpa, te dije que lo cuidaras o tú tienes la culpa de que te hagan bullyng en la escuela, o tú tienes la culpa de tener bajas calificaciones, nosotros, los adultos deberíamos tener conciencia de que un niño no puede cuidar a otro niño, apenas si se puede cuidar solo, que el bullyng no es culpa nuestra sino del que lo hace, ellos son los que están mal educados, que no somos genios y que en ocasiones hay maestros que son nefastos.
En la adolescencia se nos enseña que debemos vestirnos recatadamente porque si no, será nuestra culpa que nos falten al respeto, si un maestro, compañero o alguien en la calle nos falta al respeto seguro será nuestra culpa, si al entrar a la edad adulta alguien nos acosa seguro será nuestra culpa por como vestimos o actuamos, no debemos ser amigables porque puede malinterpretarse y será nuestra culpa si nos acosan, al casarnos si nuestro marido nos engaña seguro fue nuestra culpa por no atenderlo bien, al tener hijos seguro será nuestra culpa si son rebeldes o al crecer se van por el mal camino.
Y así podríamos seguir con uno y mil ejemplos por los cuales se nos culpa y al final nosotros ya no necesitamos que nadie nos culpe, ya lo hacemos de manera natural, nos culpamos a nosotros mismos por todo y toda esa culpa se acumula y se transforma en dolor físico y en dolor espiritual y cuando menos lo pensamos se convierte en depresión y ansiedad.
He pasado la mayor parte de mi vida sintiendo culpa, pero la edad y el pensar me ha hecho entender que no es mi culpa, si me daban mis chanclazos en mi infancia estoy segura de que el 50 % de las veces no fue mi culpa, si alguien me falto al respeto alguna vez no fue mi culpa, fue culpa de esa persona maleducada y prepotente, si me pusieron el cuerno no fue mi culpa, el que es perro lo será toda su vida, porque si ya no quieres a alguien es bien sencillo decírselo, terminar la relación y a otra cosa mariposa, eso de andar a escondidas con otra es mierda, es ganas de ser un hijo de puta, eso de: estoy con ella por mis hijos es pura cagada (si ya sé, me había tardado en ser mal hablada), porque cuando al fin llega el divorcio ni se acuerdan de que tienen hijos.
Ese sentimiento de culpa nos hace aceptar estupideces, porque en lugar de decirle a alguien:^¿ oye, que te pasa? ¿ Porque me faltas al respeto? Yo no te estoy provocando, o un:¿ sabe que (maestro, compañero de trabajo, jefe etc.) a que horas le di permiso de ofenderme? O oye esposo,¿ a ti quien te dijo que soy tu sirvienta y que el sexo es obligatorio y solo cuando tú tengas ganas? ¿Quien te dijo que tienes libertad de ir a intimar con otras mujeres y traerme el riesgo de una enfermedad?
No tenemos la culpa, en ocasiones llegamos a tal extremo que hasta descansar, tomar una siesta, leer un libro, salir a tomar un café con una amiga, tomar un baño relajante y un sin fin de cosas que deberían ser naturales nos causan culpa.
A los hijos se les cuida, se les educa y se les aconseja, cuando ya sean adultos serán responsables de sus actos y tendrán que asumir las consecuencias de tales actos, eso si, siempre seremos madres y siempre habrá un consejo y apoyo moral, tal vez económico, pero no culpa de que ellos hagan algo incorrecto, porque ya son adultos.
Me niego a sentir culpa, las acciones de los demás no son mi responsabilidad, de lo único que soy responsable son de mis propias acciones y asumo las consecuencias, primero yo, después yo y al último yo, pretendo deshacerme de toda culpa y asumir mis responsabilidades porque vida solo hay una y pasarla sufriendo y con remordimientos no es saludable.
Sin embargo no siempre somos inocentes y blancas palomitas, si eres un niño y te dicen: no hagas tal cosa (agarrar algo que no debes, robar, golpear a otro niño, irte a vagar sin decir a donde etc.) entonces si es tu culpa que te den un correctivo porque sobre aviso no hay engaño.
Si tu marido te engaña o es violento no es tu culpa, pero si es tu culpa si permaneces allí y lo dejas seguir abusando, no es tu culpa que te acosen, pero si es tu culpa si no lo denuncias y permites que siga sucediendo.
Debemos ser coherentes y analíticos y asumir cuando es nuestra culpa y cuando no y si es nuestra culpa hay que resolverlo y si no lo es, no acumularlo.
No es mi culpa ¿y tú?¿Es tu culpa?
PD.-I’m sorry
I can’t be perfect
NO TENGO LOS DERECHOS DE LA MUSICA Y DEL VIDEO